El sentido de justicia es esencial en la naturaleza humana. Si trabajas, es justo que recibas tu salario; si te comprometes con una relación, es razonable esperar que tu pareja haga lo mismo; si te esfuerzas por ser un buen padre o madre, es justo esperar buenos hijos a cambio. Sin embargo, lamentablemente, este “mundo perfecto” no existe, y la injusticia está presente en todas partes.
Dios creó un mundo perfecto, pero por su desobediencia y el deseo de conocer el mal, Adán y Eva fueron sacados del Jardín del Edén y colocados en un mundo caótico e injusto; el mismo mundo en el que aún vivimos hoy, hasta que nos reencontremos con nuestro Creador.
Hay muchas situaciones que nos dejan con sentimientos de dolor, ira y agravio. Ante la injusticia, es común que queramos asumir el papel de “vengadores” y tomar las riendas de la justicia. Sin embargo, esto a menudo genera sed de venganza, alejándonos de Dios y de la verdadera justicia. Después de todo, Dios no puede obrar en un corazón lleno de odio.
En Mateo 6:33, recibimos esta importante instrucción: “…Buscad primero su reino y su justicia…”. Esto refuerza el hecho de que la justicia de Dios es completamente diferente a la nuestra. Si bien nuestro sentido personal de justicia se moldea por nuestras emociones y experiencias personales, la justicia de Dios busca el bien común y siempre prevalece.
Por lo tanto, para liberarnos del peso de la injusticia, debemos depositar nuestra confianza en la Justicia Divina, que nunca falla. ¿Hay situaciones injustas o problemas sin resolver que te roban la paz? Entonces, únete a nosotros este domingo en la Iglesia Universal en español para entregar esas injusticias a Dios, buscando su Reino y su Justicia.
Evento: Domingo de Justicia
Día y hora: Domingo a las 10:00 h (también a las 7:30 h y 18:00h)
Ubicación: En la Iglesia Universal en español
