Contrariamente a lo que muchos piensan, la oración no es una simple recitación de palabras religiosas sin sentido ni propósito. La oración es una forma directa de comunicación con el Altísimo y una herramienta poderosa que nos ayuda a superar las dificultades y alcanzar la victoria. Las Sagradas Escrituras lo confirman:
“En cuanto a mí, a Dios invocaré, y el Señor me salvará. Tarde, mañana y mediodía me lamentaré y gemiré, y Él oirá mi voz.” (Salmo 55:16-17).
Desafortunadamente, muchas personas oran poco o nada. Como resultado, a menudo carecen de la fuerza necesaria para superar los obstáculos que surgen en su vida diaria.
La oración demuestra nuestra dependencia de Dios. A través de este acto de fe, depositamos nuestros miedos, ansiedades y dudas —todo lo que nos agobia— en Él. Por lo tanto, es una práctica sumamente importante. Este acceso directo a la comunicación con Dios está disponible para todos, en todo momento. Entonces, ¿por qué no aprovechar este gran privilegio?
Al enfrentar dificultades financieras, la oración puede brindar paz y guía. Durante conflictos familiares, puede restaurar la unidad y el amor. Al luchar contra problemas de salud, la oración eleva el espíritu y fortalece nuestra confianza en que todo estará bien.
Ya sea la aprensión antes de un examen o una reunión importante, el estrés en el trabajo o la soledad, una oración sincera puede transformar la situación y brindar claridad y paz. No importa cuán grande o pequeño sea el desafío, la oración nos conecta con Aquel que tiene el poder de ayudar.
También es esencial orar cuando las cosas van bien. Cuando triunfamos, superamos desafíos o recibimos bendiciones, debemos tomarnos un momento para dar gracias al Señor. Al hacerlo, reconocemos que nuestras victorias provienen de Dios, y esta actitud nos mantiene humildes y conectados con Él. Esta gratitud demuestra que no damos por sentado sus bendiciones y que confiamos en su presencia continua en nuestras vidas.
Para ayudarte a desarrollar o mantener este poderoso hábito, todos los días en la Iglesia Universal realizamos reuniones especiales que se centran en áreas específicas de la vida. Estas reuniones están abiertas a todos y ofrecen orientación e inspiración sobre cómo usar eficazmente el poder de la oración para lograr un cambio duradero.
Te invitamos cordialmente a participar y a experimentar cómo la fe en acción puede marcar una verdadera diferencia en tu vida. Haz clic aquí para consultar nuestro horario completo y unirte a nosotros en la Iglesia Universal en español.
Pero recuerda: la oración no se limita al ámbito de la iglesia. La oración en grupo es esencial, por lo que es fundamental acudir a la Casa de Dios con regularidad, pero ve más allá. Dondequiera que estés, recuerda que Dios está ahí para escucharte, así que haz de ese lugar tu punto de contacto con Él.
Y después de orar, confía en que Él te ha escuchado y te dará la respuesta.
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