El Mes del Propósito Mayor

11.25 November The Month of the Greater Purpose inside PT

Este noviembre ha sido declarado el “Mes del Propósito Mayor”. Un tiempo dedicado a quienes comprenden verdaderamente la importancia de ganar almas para el Reino de Dios.

El propósito supremo en la vida no se trata solo de recibir bendiciones como sanidad, prosperidad o matrimonio, aunque estas son maravillosas promesas que se encuentran en la Palabra de Dios. Más bien, el propósito supremo es la salvación de las almas.

Durante todo este mes nos centraremos en eso. Cuando te alineas con Dios y abrazas este propósito mayor, descubrirás que nunca te faltará nada en la vida.

La obra de Dios continúa a través de quienes creen en Él y lo honran. Cuando alguien reconoce el valor de su pacto con Dios y decide apoyar su obra, hace posible que el Evangelio llegue a más personas, cumpliendo así las palabras del Señor Jesús en Marcos 16:15: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”.

La Biblia también nos recuerda en Malaquías 3:10: “Traed todo el diezmo al alfolí, para que haya alimento en mi casa”.

Este versículo se malinterpreta a menudo. El diezmo no es una simple transacción a cambio de bendiciones financieras. Su significado es mucho más profundo. Es un acto de fe y reconocimiento. El verdadero propósito del diezmo es mantener la Casa de Dios, asegurando que su Palabra se siga predicando y que las vidas continúen transformándose.

¿Cómo podría Dios negar sus bendiciones a alguien que comparte su mismo propósito, la salvación de las almas?

Cuando empezamos a ver las cosas desde esta perspectiva, todo cambia. Las bendiciones llegan naturalmente. La prosperidad se convierte en consecuencia de la fidelidad, no en el fin en sí. Nuestras primicias se convierten entonces en una declaración de que todo lo que tenemos proviene de Dios.

El domingo 2 de noviembre, celebraremos una consagración especial para los «segundos»: los fieles diezmadores. Se les llama “diezmos” porque quienes devuelven su diezmo ponen a Dios en primer lugar.

En el Salmo 92:10 dice: “Pero tú has exaltado mi poder como el del búfalo; he sido ungido con aceite fresco.”

Durante esta reunión, ungiremos a los diezmadores con el aceite consagrado. Este es un aceite muy especial, seleccionado con gran cuidado. Se encuentra entre los aceites más prestigiosos de Europa. Hemos elegido lo mejor porque, cuando dedicamos algo a Dios, le ofrecemos lo mejor de nosotros.

Por fe, creemos que serás testigo de la grandeza de Dios obrando en cada área de tu vida, incluyendo tu familia, tus finanzas y tu vida espiritual. Que esta unción fortalezca tu compromiso de apoyar la obra de Dios y de extender Su mano para salvar almas para Su Reino.

Si deseas participar en este propósito de fe, puedes unirte a nosotros en la Iglesia Universal en español. Juntos, vivamos para el Propósito Mayor: la salvación de las almas.

Evento: El Mes del Propósito Mayor
Periodo: Todo el mes de noviembre
Lugar: En la Iglesia Universal en español