El Salmo 23 es uno de los versículos más preciados y citados de la Biblia, y brinda consuelo y seguridad a muchas personas. El versículo inicial, “El Señor es mi pastor; nada me faltará”, encierra una promesa poderosa. Sin embargo, el simple hecho de conocer o manifestar estas palabras no es suficiente para ver el impacto total en nuestras vidas.
Para experimentar plenamente las bendiciones del Salmo 23, debemos comenzar por reflexionar sobre el primer versículo y preguntarnos: ¿Hemos aceptado genuinamente a Dios como nuestro Pastor? ¿Estamos permitiendo que Él guíe nuestras decisiones y acciones? Vivir la promesa del “nada me faltará” requiere más que conocimiento bíblico: exige un compromiso genuino de seguir al Pastor y vivir una vida que lo honre.
Cuando nos rendimos por completo a la guía de Dios, nos abrimos a Su provisión, protección y dirección en nuestras finanzas. Si te niegas a aceptar la carencia en esta área de tu vida, ahora es el momento de dar un paso de fe.
Únete a nosotros en “El día que nada me faltará”, una reunión especial en la que declararemos las promesas del Salmo 23 sobre nuestras vidas. Al aceptar a Dios como nuestro Pastor, no solo experimentaremos Su protección sino también Su provisión de maneras extraordinarias.
Durante esta reunión, extenderemos una bendición especial para todos los vendedores. Ya sea que estés en ventas o dirigiendo un negocio, no te pierdas esta oportunidad de ver la provisión de Dios en tu vida profesional.
Evento: El día que nada me faltará
Día y hora: lunes 23 de septiembre a las 19:30h.
Ubicación: Iglesia Universal en español
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