Un estudio reciente de Internet Matters, hizo una encuesta a 1000 niños y adolescentes de entre 9 y 17 años, reveló que el 67 % utiliza aplicaciones de IA como ChatGPT y MyAI de Snapchat para simular amistades. De forma alarmante, el 12 % admitió usar estas aplicaciones porque “no tienen a nadie más con quien hablar”.
El informe destaca que estas funciones pueden “aumentar los riesgos al difuminar la línea entre lo humano y lo mecánico, dificultando que los niños reconozcan que están interactuando con una herramienta en lugar de con una persona”.
Desde chatbots parlantes hasta mascotas virtuales y juegos con IA, estas herramientas ofrecen consuelo y compañía a los niños que se sienten aislados. Sin embargo, si bien la tecnología puede ser una vía de escape útil con moderación, es fundamental comprender que la IA, por muy avanzada que sea, no puede reemplazar la conexión humana genuina.
La soledad infantil está en aumento, a menudo impulsada por factores como la sobrecarga digital, las familias desestructuradas y la falta de espacios comunitarios. Para algunos, hablar con la IA resulta más fácil que afrontar las complejidades de las amistades reales; después de todo, la IA nunca juzga, nunca discute y siempre está disponible. Pero esta ilusión de compañía puede profundizar la sensación de aislamiento de un niño en lugar de aliviarla.
Los niños necesitan más que respuestas programadas e interacción digital; necesitan juegos en la vida real, conversaciones cara a cara y la alegría de la conexión humana. El desarrollo social, la comprensión emocional y la empatía se cultivan a través de la interacción con los demás, no mediante algoritmos.
Pasar tiempo lejos de las pantallas permite a los niños explorar su creatividad, desarrollar habilidades para la resolución de problemas y comprender las emociones de maneras que las máquinas no pueden enseñar. Animar a los niños a participar en actividades en grupo, disfrutar del juego al aire libre y entablar conversaciones significativas es crucial para su bienestar emocional y social.
En la Iglesia Universal, reconocemos la importancia de crear espacios seguros y enriquecedores donde niños y adolescentes puedan crecer. Por eso, nuestra EBI (Escuela Bíblica Infantil) ofrece un ambiente acogedor dirigido por voluntarios con certificación DBS. Mientras los padres participan en reuniones y eventos seleccionados, los niños de la EBI se benefician de lecciones interactivas, actividades divertidas y oportunidades para forjar amistades auténticas, todo ello basado en valores y aprendizaje bíblicos.
También ofrecemos grupos como UTF (Universal Teen Force), dedicado a adolescentes de 11 a 14 años, y la Fuerza Joven, VYG (Victory Youth Group) para jóvenes adultos. Estos grupos ofrecen diversas actividades y orientación práctica basada en enseñanzas bíblicas para ayudarlos a convertirse en adultos exitosos.
Para más información, llama a nuestra línea de ayuda disponible las 24 horas al 020 7686 6048, envía un mensaje de WhatsApp al 07352 945274.
